Esta exquisita combinación de sabores tropicales te transportará a un paraíso de dulzura. La suavidad del maracuyá se mezcla perfectamente con la dulzura del mango, creando un postre irresistible que te hará querer repetir una y otra vez. ¡Una experiencia celestial en cada bocado!
INGREDIENTES
Base
Bizcocho
de cacao
Semifrío de maracuyá
120 g de
pulpa de maracuyá
130 g de
azúcar glas
250 g de
yogur griego natural
500 g de
nata 35% mg
5 g de
gelatina neutra en hojas
Gelée de mango
120 g de
pulpa de mango
2 hojas de
gelatina neutra
3
cucharadas de agua
1
cucharada de azúcar glas*
½ zumo de
limón
Decoración
Virutas de
chocolate
Bolitas de
chocolate
*Se puede
añadir el azúcar que se desee.
PREPARACIÓN
Encima de
un plato ponemos un aro de 20-22 cm.
Ponemos la
plancha de bizcocho de cacao. Ponemos una cinta de acetato por todo el contorno
y ajustamos el aro.
Semifrío de maracuyá
Ponemos a
hidratar la gelatina en agua.
En un bol
ponemos la nata, el yogur griego y el azúcar glas. Semi montamos hasta que esté
algo firme.
Incorporamos
poco a poco y con movimientos envolventes la pulpa de maracuyá.
Escurrimos
la gelatina, la calentamos unos segundos al microondas, añadimos unas
cucharadas de la mezcla, mezclamos bien y se lo incorporamos poco a poco al
total de la mezcla.
Vertemos
sobre el bizcocho de cacao. Alisamos la superficie y llevamos a la nevera 3-5
horas.
Gelée de mango
Hidratamos
la gelatina en el agua.
En una
taza ponemos la pulpa de mango, el azúcar y el zumo de limón, mezclamos bien.
La calentamos unos segundos la gelatina en el microondas y se la añadimos a la pulpa
de mango, mezclamos.
Sacamos el
semifrío de la nevera y vertemos la gelée con mucho cuidado por encima,
moviendo un poco el plato para que quede bien cubierta.
Llevamos
de nuevo a la nevera, unas 8 horas o de un día para otro.
Quitamos
el aro metálico, la cinta de acetato del contorno y decoramos poniendo virutas
de chocolate y bolitas.
Conservar
en la nevera.