Me maravillan las lámparas Tiffanys, el colorido de sus cristales, sus composiciones, sus formas, son todas preciosas.
Pues toda esa belleza que encierran, la he querido trasladar a la pastelería, y este es el resultado. Espero que les guste.
INGREDIENTES
Bizcocho de vainilla: 4 huevos, 65 gr de mantequilla sin sal, 130 gr de azúcar, 120 gr de harina, 50 gr de maicena, 1 cucharada de levadura en polvo y media vaina de vainilla.
Crema: 130 gr de mantequilla sin sal, 100 gr de azúcar glas, unas gotas de esencia de vainilla y 2 cucharadas de leche.
Almíbar: 150 ml de agua, 3 cucharadas de azúcar, media vaina de vainilla y un chorrito de brandy.
Fondant y colorantes alimenticios.
PREPARACIÓN
Precalentamos le horno a 180ºC.
Bizcocho: montamos los huevos con el azúcar hasta que dupliquen su volumen. Abrimos la vaina de vainilla y extremos sus semillas, se la añadimos. Mezclamos la harina con la maicena y la levadura, lo tamizamos. Se la vamos incorporando poco a poco y en forma de lluvia a la mezcla de los huevos. Derretimos la mantequilla y la integramos añadiéndola en forma de hilo y mezclamos con cuidado hasta obtener una crema homogénea.
Ponemos en el molde y horneamos unos 45 minutos, más o menos.
Cuando esté casi frío lo desmoldamos sobre una rejilla.
Almíbar: en un cazo ponemos los ingredientes, menos el brandy y llevamos a ebullición unos minutos. Dejamos enfriar y le añadimos en brandy.
Crema: batimos la mantequilla, que deberá estar a punto pomada, cuando esté cremosa, le añadimos el azúcar y la esencia y sin dejar de batir, le añadimos la leche. Debe quedar cremosa.
Una vez frío el bizcocho lo cortamos en horizontal y por la mitad. A ambas partes le ponemos el almíbar que empape bien, sobre todo los bordes.
Ponemos la crema reservando un poco y tapamos con la capa de bizcocho.
Cubrimos con el resto de la crema.
Se dibuja un boceto con la idea que se quiera.
Con fondant hacemos los diferentes dibujos imitando una lámpara Tiffany.
Fuente: idea propia.