Otro Reto “Dale una vuelta a” #Dale1vueltaa
La anfitriona es Teresa y nos propone que nos
inspiremos en una tarta Sacher, este dulce clásico de la pastelería austriaca a
base de un bizcocho de chocolate, relleno con mermelada de albaricoque y bañado
con chocolate.
Hice estos pastelitos individuales dándole
una vuelta, conservando la esencia de la original poniendo todos los
ingredientes que lleva pero de diferente manera.
Aquí les muestro las demás propuestas:
Teresa de “La cocina de Tesa”
Esther de “Repostería con emoción”
Cristina de “Edana cuenta”
Deborah de “Mi toque en la cocina”
Iván de “Panes con garra”
Victoria del blog “De flores comestibles”
INGREDIENTES
Galletas de cacao
100 g de mantequilla sin sal
65 g de azúcar glas
1 huevo P
225 g de harina
20 g de cacao puro en polvo
Una pizca de sal
Bizcocho Sacher
70 g de harina
70 g de mantequilla sin sal
65 g de chocolate negro
3 huevos L
50 g de azúcar blanquilla
40 g de azúcar glas
Vainilla
Crema de albaricoque
50 g de mantequilla sin sal
40 g de albaricoques deshidratados
(orejones)
25 g de agua
15 g de azúcar glas
El zumo de medio limón
Láminas de chocolate negro
200 g de chocolate negro 75%
Baño de chocolate
50 g de chocolate negro
1 cucharada de mantequilla sin sal
Además
Mermelada de albaricoque
Albaricoques deshidratados (orejones)
Pétalos de flores comestibles
PREPARACIÓN
Para 4 individuales.
Galletas de cacao
Molde ovalado de 13 x 5 de ancho y 3 de
alto
En
un bol ponemos la mantequilla que deberá estar a punto pomada con el azúcar
glas y la vainilla, batimos bien. Añadimos el huevo, batimos. Integramos la
harina, el cacao y la sal. Estiramos entre dos hojas de papel vegetal y
llevamos a la nevera como mínimo 1 hora.
Estiramos
un poco con un rodillo y cortamos piezas con el molde ovalado, las ponemos
sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal separadas unas de otras.
Llevamos
a la nevera mientras precalentamos el horno a 170ºC.
Horneamos
unos 15-18 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Bizcocho Sacher
Molde o marco cuadrado de 20 cm.
En un bol ponemos los ingredientes secos: la harina y la sal.
En otro bol ponemos el chocolate y la mantequilla, derretimos en
el microondas a intervalos cortos, añadimos la vainilla, mezclamos hasta que
esté derretido todo.
Separamos las claras de las yemas.
Las claras las montamos a punto de nieve con el azúcar
blanquilla.
Las yemas las añadimos el chocolate con la mantequilla y la
vainilla, mezclamos. Poco a poco añadimos los ingredientes secos e integramos.
Por último y poco a poco incorporamos las claras montadas con
movimientos envolventes.
Vertemos en el molde y horneamos unos 35 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Crema de albaricoque
Picamos muy pequeños los orejones, lo
ponemos en un recipiente con el agua muy caliente, dejamos que hidraten 1-2
horas. Le añadimos el zumo de limón y lo molemos bien hasta que quede como una
crema.
En un bol ponemos la mantequilla y
batimos hasta que esté cremosa, le añadimos el azúcar glas, batimos. Le
añadimos la crema de orejones, mezclamos bien y ponemos en una manga pastelera
con boquilla redonda lisa. Reservamos en la nevera.
Láminas de chocolate negro
Atemperamos el chocolate. Derretir entre
50º-55ºC
Enfriado a
28º-29ºC. Atemperado a 30º-31ºC.
Poner sobre un papel guitarra o
plástico, colocar otro papel encima y estirar el chocolate con un rodillo.
Dejar enfriar un poco y presionar con el
molde ovalado y hacer varias láminas. Dejar enfriar en la nevera.
Despegamos con cuidado y reservamos.
Baño de chocolate
Derretir el chocolate con la
mantequilla, mezclar bien.
Montaje
A cada galleta ovalada le ponemos un
poco de mermelada de albaricoque.
Con el molde ovalado cortamos piezas de
bizcocho Sacher, ponemos sobre una rejilla y cubrimos solo un extremo con el baño
de chocolate. Colocamos cada bizcocho encima de cada galleta.
Encima de cada bizcocho ponemos una
lámina ovalada de chocolate.
Ponemos encima de la lámina de chocolate
crema de albaricoque ayudándonos de la manga pastelera. Decoramos con tiras de
orejones y pétalos de flores comestibles.
Guardar en la nevera hasta el momento de
servir.
Mi libro Gofio para todos